En esta era moderna, es cada vez más importante asegurarse de que tú y tus hijos estén activos y en forma. El ejercicio no solo es bueno para la salud física, sino también para la salud mental y emocional. ¡Y qué mejor manera de hacerlo juntos como familia!
En este blog, te daré algunos consejos y recomendaciones sobre los «haz» y los «no hagas» de hacer ejercicio con tus hijos.
Los «Do’s» de hacer ejercicio con tus hijos
- Encuentra actividades que disfruten tanto tú como tus hijos. ¡No tiene sentido obligarlos a hacer algo que no les gusta! Puedes probar diferentes cosas, como andar en bicicleta, jugar al fútbol, ir al parque, bailar, etc.
- Hazlo una rutina diaria. Una vez que hayas encontrado una actividad que les guste, trata de hacerla todos los días o al menos varios días a la semana. Esto les ayudará a tus hijos a desarrollar hábitos saludables y a mantenerse activos.
- Se paciente y divertido. ¡No te tomes el ejercicio con tus hijos demasiado en serio! Trata de disfrutar el momento y no te preocupes si no están haciendo las cosas perfectamente. Recuerda que lo más importante es pasar tiempo juntos y divertirse.
- Pasa tiempo de calidad juntos. El ejercicio no solo es bueno para la salud, sino que también es una excelente oportunidad para pasar tiempo de calidad con tus hijos. Puedes charlar, reír y conocerlos mejor mientras hacen ejercicio juntos.
Los «Don’ts» de hacer ejercicio con tus hijos
- No los obligues a hacer ejercicio si no quieren. Como dije antes, es importante encontrar actividades que les gusten a tus hijos. Si no quieren hacer ejercicio, respeta su decisión y trata de encontrar algo que les interese.
- No los compares con otros niños. Cada niño es diferente y tiene sus propios ritmos y habilidades. No los compares con otros niños en cuanto a su rendimiento o nivel de habilidad. En su lugar, alienta a tus hijos a superar sus propios límites y lograr sus metas.
- No los presiones para que alcancen metas inalcanzables. No esperes que tus hijos se conviertan en atletas profesionales de la noche a la mañana. Cada niño tiene su propio proceso y no debes presionarlos para que alcancen metas inalcanzables o imposibles. En su lugar, ayúdalos a establecer metas alcanzables y realistas y a trabajar hacia ellas de manera gradual.
- No los critiques por su rendimiento. Lo más importante es que estén disfrutando y pasando tiempo juntos, no si están haciendo las cosas perfectamente. No critiques a tus hijos por su rendimiento o por cometer errores, en su lugar, alienta a mejorar y a aprender de ellos.
Consejos adicionales
- Varia las actividades. Trata de variar las actividades para evitar la monotonía y para que tus hijos puedan aprender y desarrollar diferentes habilidades.
- Encuentra actividades al aire libre. El aire libre es un excelente lugar para hacer ejercicio. Aprovecha al máximo el buen tiempo y trata de encontrar actividades al aire libre que disfruten tú y tus hijos.
- Hazlo un juego en lugar de una tarea. Trata de hacer que el ejercicio sea un juego en lugar de una tarea aburrida o una obligación. Así, tus hijos se sentirán más motivados a participar y disfrutarán más el momento.
FAQs
Puedes probar diferentes actividades y preguntarles a tus hijos cuáles les gustaron más. También puedes observar sus intereses y tratar de encontrar actividades relacionadas.
Es importante respetar la decisión de tu hijo y no obligarlo a hacer algo que no quiere. En su lugar, trata de encontrar actividades que les interesen.
Lo ideal sería hacer ejercicio con tus hijos al menos varios días a la semana, pero es importante adaptarlo a tus necesidades y disponibilidad.
Es importante recordar que cada niño es diferente y tiene su propio proceso. En lugar de comparar a tus hijos con otros, alienta a tus hijos a superar sus propios límites y lograr sus metas.
Es importante establecer metas alcanzables y realistas para tus hijos, y ayudarles a trabajar hacia ellas de manera gradual. Puede ser desde algo tan simple como mejorar en un deporte específico o en su capacidad cardiovascular.
Trata de hacer del ejercicio un juego, y no una tarea aburrida. Puedes crear competencias divertidas, premios, etc. También puedes variar las actividades para evitar la monotonía.
El aire libre es un excelente lugar para hacer ejercicio, ya que también puede mejorar el estado físico y mental, especialmente en los niños. Aprovecha al máximo el buen tiempo y trata de encontrar actividades al aire libre que disfruten tú y tus hijos.
Conclusión
En resumen, hacer ejercicio con tus hijos es una excelente manera de mejorar tu salud física y mental, y también de fortalecer tus relaciones con tus hijos. Asegúrate de encontrar actividades que disfruten tú y tus hijos, hacerlo una rutina, ser paciente y divertido, y pasar tiempo de calidad juntos.
Pero también es importante evitar obligar a tus hijos a hacer ejercicio, compararlos con otros niños, presionarlos para alcanzar metas inalcanzables o criticarlos por su rendimiento.
En su lugar, ayúdalos a establecer metas alcanzables, variar las actividades, encontrar actividades al aire libre y hacerlo un juego.
